Sigilosa y vanidosa,
Te asomaste a mi ventana,
Para presumir de tu belleza,
De esa impávida fortaleza.
Mas este día no estabas sola,
Una estrella a tu lado brillaba,
Y las dos hermosas resaltaban,
En el cielo su grandeza.
Oh luna cual grande y brillante eres,
Callada y enigmática,
Cargas tantos secretos
En esas entrañas llenas de misterio.
Tu enorme energía vibra,
Hasta mi interior lo reconoce,
Que cuando palidece la noche,
Si te asomas en el cielo,
Transformas su presencia.
Inmensa en el firmamento apareces
Como un gran farol encendido,
En las noches donde te ausentas
Extraño tu presencia,
Porque tu galantería
Desde lejos se aprecia.
Monibe
© Monica Betancur
2012 Todos los derechos reservados.
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